Esta Especialidad Odontológica se encarga de la prevención, diagnóstico y tratamiento de todas las enfermedades infecciosas (GINGIVITIS y PERIODONTITIS) que atacan al aparato de fijación de los dientes: encías, hueso alveolar, cemento y ligamento periodontal; y que son las responsables hasta del 80% de las pérdidas dentarias en sujetos mayores de 35 años. No basta con unos dientes sanos, la salud de las encías es tan o más importante que permanecer libre de caries.
Usualmente, el tratamiento consiste en la eliminación y control de los irritantes infecciosos locales como la placa bacteriana y cálculo dental a través de tartrectomías (limpiezas) profundas y la enseñanza de adecuadas técnicas de higiene oral. En los casos más avanzados suele entonces ser necesario implementar procedimientos quirúrgicos más complejos que involucran los curetajes y raspados radiculares, levantamiento de colgajos invasivos, injertos óseos, colocación de membranas y la llamada REGENERACIÓN TISULAR GUIADA.
La Enfermedad Periodontal es casi siempre asintomática en sus fases iniciales, por eso es tan peligrosa y destructiva. Cuando ya aparecen los primeros signos como sangramiento al cepillado, separación de los dientes y movilidad dental; estamos generalmente en presencia de fases avanzadas de la misma. Sin tratamiento especializado se pierde todo el hueso de sostén y entonces los dientes se aflojarán y caerán irremediablemente.
Otro beneficio adicional de esta Especialidad es el que podemos obtener de la llamada CIRUGÍA PLÁSTICA PERIODONTAL, que abarca un conjunto de técnicas que permiten al Odontólogo modificar el contorno, grosor y forma de las encías; logrando efectos estéticos invalorables para los pacientes. Generalmente este tipo de cirugía es complementaria a tratamientos de ortodoncia, blanqueamiento y estética dental.